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sábado, 26 de julio de 2014

Mont Blanc por los pelos

El tiempo en la Alta Savoya no es siempre tan bueno como quisiéramos, pero con un poco de flexibilidad, hay un montón de opciones para poder disfrutar de estas montañas.

El plan inicial y objetivo del viaje era ascender a la cumbre del Mt Blanc, preferentemente por una de las rutas más elegantes por las que se puede hacer: la arista de BIONNASSAY.

La Aguja de Bionnassay es uno de los contrafuertes del Mont Blanc que se desprenden en las cercanías del Dôme du Goûter. Su arista sur es una elegante línea cubierta de nieve en la que forman preciosas cornisas y que dispone, también, de un tramo rocoso con algunos pasos de escalada fácil.

Las condiciones de esta "Travesía Real" como la define François Damilano, uno de los guías más respetados de Chamonix, deberán estar notablemente a nuestro favor para poder abordarla. Esto es, que no haya demasiada nieve fresca, que esté estable, y que el viento y la meteorología se porten bien.

Por desgracia, estos días en Chamonix, han sido un tanto revueltos, pero dándole vueltas a la cabeza, haciendo y deshaciendo reservas en refugio, hemos conseguido llegar a la cota 4.810 desde Tête Rousse, con Roger Lopez, Tomás y Raúl.

Un saludo y a por la Próxima titanes!!

Amanecer sobre la Arista de Les Bosses, con la cumbre del Mont Blanc al fondo.

Descendiendo hacia el refugio Vallot

Tomás y, detrás suyo, Roger y Raúl

Séracs en el Dôme du Goûter

Yo y Tomás, con la cara norte del Mont Blanc de fondo.

Alegría!!



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