Devorando la Vida

Después de habernos puesto los antebrazos como Popeye en La fiesta del Bíceps y en Vadiello, toca poner fin a la semanita y al otoño de trepadas con Félix. A partir de ahora será un poco más difícil quedar, ya que la temporada de esquí se acerca y los dos estaremos liados en nuestros respectivos trabajos, así que elegimos La Montañesa para tal despedida.
Siendo realistas, estamos un poco cansados y tampoco se trata de meternos en ningún marrón para salir de noche y esas cosas, así que nos decantamos por una vía que nos recomienda Santos: Devorando la vida.

Abierta por J. Carlos Guichot, se trata de una ruta de 200 metros, con reuniones rapelables y con unos largos muy bonitos.
La vía se sitúa justo encima del Arco Natural,  la izquierda de la Canal Mayor y con vistas al increíble Pilar del Sobrarbe.

La escalada se desarrolla alternando diedros y fisuras desequipadas con pasos finos de placa bien asegurados con parabolts.

Una vía muy recomendable para esos días en los que uno no se quiere enmarronar demasiado, pero no nos confundamos,  sigue siendo una vía de autoprotección y en la que hay que hay que apretar un poquito. Eso sí, las chapas están bien puestas.

Félix en el primer largo.

Bonitos diedros y caliza de calidad

El Pilar del Sobrarbe, espectacular.