Debido a su latitud y a su modesta altura, en el Pirineo no abundan los paisajes glaciares. De hecho, hoy en día, los glaciares pirenaicos se pueden contar con los dedos y su aspecto no se asemeja a las grandes extensiones nevadas escoltadas por enormes grietas y seracs.
Sin embargo, uno de los recuerdos de la última era glacial lo podemos encontrar en el macizo del Vignemale, gracias a la segunda extensión nevada de los Pirineos, el glaciar de Ossoue y al impresionante circo de Gaube, donde su glaciar nos da una idea del aspecto que, hace años, tenían estas montañas.
El pasado viernes, comenzamos desde Bujaruelo, junto con Arturo, Belén y Alberto la vuelta al macizo del Vignemale. De esta forma, se tiene una completa percepción de las dimensiones de este coloso de los Pirineos, admirando cada una de sus vertientes y llevando nuestra imaginación a la época en que el hielo cubría los valles.
Espero que os gustase la travesía y que lo pasaseis tan bien como yo.
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En el glaciar de Ossoue. |
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Junto a la salida del couloir de Gaube |
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Trepada a la cima |
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Albert, Arturo, Belén y yo |
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En la cresta de Clot de la Hount |
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Amanecer desde Oulettes |
Un abrazo!
Aupa Fede!
ResponderEliminarSin duda lo pasamos tan bien como tú,fue una bonita experiencia con una compañía inmejorable. A ver si este verano podemos hacer otra. De momento ya estoy pensando en otras montañas...